El sábado tuvimos la última reunión en A Coruña antes de irnos, creo que se notaba el que estamos a las puertas de irnos en el simple aire que respirábamos. Pero sin duda el martes y el miércoles estuvieron estupendos. Los becados nos fuimos en dos autobuses (uno desde Vigo y otro desde A Coruña) hacia Madrid, a tramitar los papeles de la embajada. Las horas de autobús no fueron nada tan pronto como empezamos a contar ciertas historias del sábado pasado... jajajaja. Es inevitable no reírse. Además nos acompañaron chicas de la primera edición, que ya han tenido su historia y vinieron a compartirlas con nosotros. Nos contestaron a absolutamente todas nuestras preguntas, y eso se algo que se les agradece de veras. Las horas de bus te aseguro que ayudaron a conocer a bastante gente que sólo tenía agregada en el Tuenti, a hablarnos como si ya fuéramos de toda la vida. Y a los que ya había empezado a conocer... pues a reírte un poco más si cabe (sí, sabéis de sobra que va por vosotras). Lo único que me dio pena, es que a penas pudimos hablar con los de Coruña. Bueno, a eso siempre se está a tiempo en NY. Como comprenderás, esa noche teníamos demasiadas cosas para compartir como para dormir. Así que bueno, ya te puedes imaginar que nos dieron las tantas en el cuarto piso.
Sin duda NY se ve más cerca que nunca en estos momentos. Tanta ciudad de luces me empieza a deslumbrar. Aunque no dudes, que los treinta y nueve días que me quedan aquí los tengo ya repletos de actividades con mis niñas favoritas. Hoy, ni más ni menos, toca Vetusta Morla y luego casa de Marta. Si de algo me estoy empezando a dar cuenta, es que el momento debo disfrutarlo al máximo. Así que si me permites, tengo un día por delante que promete bastante.
Pd: la canción de hoy es una de MGMT, no se me ocurren otros que puedan cumplir mejor con el título. Y la foto, la foto es de esos momentos que una tiene grabada a fuego en su memoria.
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